No hay palabras para expresar el dolor que se siente al haber perdido a una persona tan querida de la manera más absurda.
Cecilia Melgar (26) era mi cuñada, era una chica ejemplar, maravillosa, con tantos proyectos ya encaminados, pero sus sueños se esfumaron cuando este martes 21 de marzo un chofer imprudente le quitó la vida.
Ella, como tantos ciclistas que transitan por esta ciudad, iba camino al trabajo usando su medio de transporte favorito, usando todas las medidas de seguridad, enfrentando a una ciudad agresiva y violenta con los ciclistas y los peatones, porque en sus palabras, era una forma de no contaminar el medio ambiente, ella era una activista que luchaba por la sostenibilidad ambiental. Sin embargo al promediar las 8.40 am. el chofer del camión volquete Sr. Marcos Perdomo Perez la atropelló cuando ella estaba al lado derecho de la Cuadra 11 de la Av. 6 de Agosto, en Jesús María.
Al Sr. Perdomo, de nacionalidad venezolana lo detuvieron, pero lo soltaron al día siguiente, alegando ante las autoridades que “lo hizo sin querer”, ¿es que ahora los que salen a manejar atropellan a una persona queriendo? Obviamente se trata de la irresponsabilidad, negligencia e imprudencia de los choferes en las carreteras. Porque en este país no existe respeto y no importa si tú que estás al volante eres peruano o extranjero.
La tasa de mortalidad por accidentes de tránsito en nuestro país es una de las más altas de Latinoamérica.
Según datos de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), en 2020 se registraron un total de 19,791 accidentes de tránsito, que resultaron en 3,742 muertes y 21,137 heridos.
Las principales causas de los accidentes de tránsito en Perú incluyen la imprudencia de los conductores, el exceso de velocidad, el consumo de alcohol y drogas al volante y la falta de respeto a las normas de tránsito. A esto se suma la falta de infraestructura adecuada, la escasa señalización y la falta de mantenimiento de las carreteras.
Según el mismo informe, durante el 2020 en Perú se registraron 552 atropellos a ciclistas en todo el país. De estos, 97 resultaron en la muerte de la víctima, mientras que los demás provocaron heridas graves o leves.
La mayoría de estos atropellos ocurrieron en áreas urbanas y un gran porcentaje fueron hombres jóvenes.
Estos números son solo una representación de los casos registrados y es probable que existan casos no reportados que no han sido incluidos en estas estadísticas disponibles a la fecha.
Según este panorama, ¿qué espera el Ministerio de Transportes para tomar acciones más efectivas para cambiar la cultura vial en el país? ¿Cuánto más debemos esperar? ¿Cuántas vidas más deben ser sacrificadas para que existan cambios reales?.
Nuestra Ceci no volverá, pero su partida no será en vano. Pedimos a la fiscalía que actúe diligentemente y responsabilice con todo el peso de la ley a aquellos que quitan vidas, no solo a quien causó la muerte de Cecilia Melgar, sino también a aquellos que atropellan o matan a peatones o ciclistas a diario. #JusticiaparaCeci
